La Memoria de Miguel Ángel Blanco y de todos los miles de ciudadanos españoles que han entregado su vida, su integridad, su seguridad y su libertad por la actividad criminal de la banda terrorista ETA durante más de cincuenta años exigen de la sociedad su presencia masiva el próximo domingo en Colón.
Es difícil comprender que se hayan dilapidado los avances políticos, sociales y judiciales que tras el secuestro y asesinato de Miguel Ángel nos hicieron estar muy cerca de la derrota de ETA tanto en su estrategia criminal como en su legitimación social y en la imposición de su proyecto político liberticida.
Consideramos que no es suficiente con que hayan dejado de matar provisionalmente, sino que nuestro Estado constitucional tiene que salir victorioso, impidiendo que los enemigos de la democracia y la libertad continúen riéndose de los españoles de bien.
La alegría de los asesinos y de sus cómplices es el dolor y la indefensión de las víctimas. Esta situación simboliza una derrota colectiva que debe llevarnos, a quienes creemos en la libertad, a la reflexión y la autocrítica.
ETA sigue trabajando política e institucionalmente por hacer avanzar su proyecto de ruptura asentándose, día a día, gracias a la sangre y el sufrimiento provocados injusta y despiadadamente; con impunidad social, política y judicial.
Debemos ser firmes en la exigencia a todos los poderes del Estado para que el significado político de las víctimas no sea malgastado, ni su Memoria humillada.
Por estos motivos la Fundación Miguel Ángel Blanco estará presente el próximo domingo en la Plaza de Colón en Madrid, a las 13 horas, en homenaje a todas las víctimas del terrorismo y desde el compromiso firme de seguir luchando por un final del terrorismo del que la sociedad española pueda sentirse orgullosa.